La voz de alarma del señor Bruley
El señor Bruley es propietario en Planas del Rey. Fue, entre otras cosas, responsable de una estación depuradora durante cinco años en Francia, y vuelve a dar la voz de alarma este 4 de junio de 2025. Su diagnóstico es claro:
«Desde hace unos quince años intento alertar a todos los actores de Planas sobre la gravedad del problema del tratamiento de aguas residuales. Desde que nuestra estación depuradora dejó de funcionar, los vertidos se evacuaban sin ningún tratamiento al barranco situado en la entrada de Planas por el lado de Hospitalet. Hoy, ya no fluye ningún efluente: la red está atascada. Las aguas residuales emergen en las calles y en las parcelas. Vamos directos al desastre.»
Con 450 casas y hasta 2.000 habitantes en temporada alta, Planas genera una carga contaminante colosal. La red, diseñada en los años 60, está hoy al límite. Mal mantenida, obsoleta, enterrada sin planos, se ha vuelto incontrolable. El hormigón se agrieta, las raíces invaden las conducciones, las tuberías están rotas o hundidas bajo las casas. Y sin embargo, seguimos pagando el saneamiento a Comaigua, proveedor elegido por el ayuntamiento de Pratdip.
El señor Ripolles reconoce el fracaso
En un mensaje reciente, Domingo Ripolles, concejal municipal en Pratdip y representante de Planas, reconoce que:
«Las construcciones perduran en el tiempo, y lo bien hecho como lo mal hecho siempre acaba saliendo a la luz: canalizaciones que pasan por propiedades privadas, agua potable en terrenos inaccesibles, ausencia de planos… Ese es nuestro legado.»
¿Y qué hace hoy el ayuntamiento para reparar estos errores? Una subvención de 700.000 euros fue concedida por la Generalitat para rehabilitar la estación depuradora. Sin embargo, según el propio Domingo Ripolles, los fondos no se liberarán mientras la urbanización no haya renovado la red de alcantarillado.
Mensaje de audio del señor Ripolles
Una estación depuradora nacida de la voluntad de los vecinos
Es importante recordar que la estación depuradora de Planas del Rey no fue una iniciativa pública, sino el resultado de un compromiso ejemplar de los propietarios de la urbanización. Desde 1977, conscientes de los desafíos sanitarios y medioambientales, decidieron financiar ellos mismos la construcción de esta infraestructura, sin ninguna ayuda del Estado ni del ayuntamiento de Pratdip.
Este proyecto fue impulsado por dos antiguos propietarios visionarios, el señor Riffat y el señor Archambault, quienes lideraron la creación de la estación. La instalación fue financiada íntegramente por los residentes de Planas del Rey y recibió la homologación de la Agencia Catalana del Agua (ACA) desde su puesta en funcionamiento.
Por sentencia judicial del 23 de noviembre de 1993, el ayuntamiento de Pratdip se convirtió en propietario oficial de todas las zonas comunes de la urbanización, incluyendo las calles, la estación depuradora, las bombas, las canalizaciones, las zonas verdes y el alumbrado público.
Confirmación del abogado de la ECU que las áreas comunes están registradas a nombre del ayuntamiento
Más recientemente, el 25 de abril de 2017, el estado de conformidad de la estación fue confirmado por BSI Management Systems, un organismo internacional especializado en certificaciones técnicas y medioambientales. Prueba, si aún era necesario, de que esta instalación era un activo estratégico, aún explotable en 2017, si hubiera existido voluntad política de ponerla en marcha.
Las responsabilidades del ayuntamiento de Pratdip
1. Propiedad municipal de la estación depuradora
La estación depuradora es hoy propiedad del ayuntamiento, lo que significa:
- Es jurídicamente responsable de su funcionamiento.
- Esta estación fue voluntariamente cerrada por el consejo municipal de Pratdip en 2016.
2. Falta de conexión mantenida deliberadamente
La condición técnica principal para que la estación funcione era conectar los alcantarillados existentes a la instalación.
En realidad, la red de alcantarillado de Planas estaba en gran parte — aunque no completamente — conectada a la estación depuradora.
Obligación legal no respetada
El artículo 26 de la Ley 7/1985 obliga a los municipios, incluso los pequeños, a garantizar el tratamiento de las aguas residuales.
El ayuntamiento no puede negarse a cumplir con esta obligación amparándose en un supuesto estatus de urbanización “privada” sin base legal actual.
Más aún cuando los vecinos pagan cada año 280.000 euros de impuesto sobre bienes inmuebles (IBI).
Subvención concedida pero no utilizada
Una subvención de 700.000 euros habría sido concedida (según testimonios recientes) para la puesta en marcha de la estación.
Pero esta ayuda sigue condicionada a la rehabilitación previa de la red de alcantarillado.
Una vez más, el ayuntamiento bloquea indirectamente la solución.
Conclusión
Sí, la responsabilidad del ayuntamiento se ve comprometida en varios niveles:
- Jurídico (obligación de servicio público)
- Técnico (recepción de infraestructuras no operativas)
- Político (ausencia de voluntad de actuar desde hace más de 15 años)
Una alerta sanitaria para toda la región
Lo que ocurre en Planas del Rey supera ahora el ámbito local. El vertido incontrolado de aguas residuales, los riesgos de contaminación del suelo, de las aguas superficiales y de las capas freáticas amenazan el equilibrio ecológico de toda la zona.
Si no se toman medidas urgentes, no sólo Planas, sino también los municipios vecinos, las playas, los cultivos y la salud pública se verán afectados.
Esta situación no es una sorpresa. Desde el 4 de noviembre de 2019, la asociación SOS Planas ya había dado la voz de alarma a través de un artículo titulado: Pratdip, una catástrofe sanitaria y ecológica anunciada.. Desde entonces, no se ha hecho nada, salvo la recepción oficial de la estación depuradora por parte del ayuntamiento, sin que se haya emprendido ningún trabajo de rehabilitación.
Esto ya no es una alerta. Es una evidencia. Planas del Rey vive hoy una crisis sanitaria y medioambiental de gran envergadura. Y esta vez, ni los residentes, ni las instituciones, ni las autoridades podrán decir que no lo sabían.
SOS Planas